miércoles, 13 de julio de 2011

boquitas...

Dos papas y muchos deseos, así que empecé con un sabor en la mente: el sabor es mi país. Mi paladar me lleva a esos lugares de la hobohemia, los lugares de artistas y pobres, a los que gravito siempre. Así que hoy cuando fui al supermercado me encontré con el perejil y regresé contenta en casa. Probablemente cuando regrese me sentiré como ahora: el extranjero. No importa, sigo aquí en el lugar donde la nostalgia y el presente se encuentran, ese nudo en el estómago que me llama a casa.

Casa es el lugar donde estoy y no escapo, donde soy y no oculto.

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