Rayana vino a la casa antes, tomamos cerveza y afuera... caminar... el metro, gente, azul, verde y coral... ... la estación es tan grande que ella siempre se pierde (va todas las semanas y aún así se pierde...) Llegamos. Mateo esperaba ansioso como siempre... el concierto argentinos y brasileiros.. los últimos parecían los "beach boys" de brasil. Terminó. El Memorial de Latinoamérica es alucinante, cuando lo visito sigo con la boca abierta, Niemeyer... las formas curvas, concreto, metal y vidrio... Se rompe la taza y cada quien pasa su casa. Me quedo sola.
Es la primera vez que regreso desde allí en bus, hablo con una chica en la fila, me da su nombre y dice que la busque en facebook. Suben dos chicas más jóvenes y con minifaldas más reducidas... van para una calle que conozco pero no las conozco. Les doy indicaciones para llegar allí, todas bajamos en la misma parada. Al fin la Paulista.. las chicas jóvenes salen corriendo del bus. Sigo caminando y Darth Vader pasea con unos soldados. La gente grita y el tráfico se para en un suspiro. Camino, la augusta. Camino, la gente. Camino, la noche. Camino, la nada. Las putas de la esquina me ven pasar por esa calle solitaria. Hay unos clubes en la bela cintra que sospecho que son puteros. En fin, llego a casa.